Matías Garavano: “fue el partido soñado”

TUCUMÁN (Enviado especial de época). Su rostro lo decía todo, la sonrisa plena y el más reclamado por la prensa correntina y también por la tucumana. No era para menos, Matías Garavano había coronado su gran tarde conteniéndole el tiro penal a Víctor Píriz Alves, cuando sólo faltaban cinco minutos para finalizar el partido de la 30ª fecha de la B Nacional.

Partido que marcó la paternidad de Boca Unidos sobre el conjunto tucumano (jugaron 8 partidos, el equipo correntino ganó 5 y empataron 3).

El arquero que defiende los colores “aurirrojo” afirmó que “fue una actuación completa. Más allá de haber mantenido el cero, creo que estuve a la altura nuevamente y gracias a Dios y a los chicos que me dieron su apoyo de entrada”.

“Estoy contento por el partido, por la actuación en lo individual y en lo grupal también porque creo que los chicos hicieron un trabajo muy bueno. Un sacrifico muy grande porque veníamos de dos partidos en cancha pesada en la semana y por eso es un gran logro del equipo también”, sostuvo.

En lo personal Garavano ponderó haber tenido de nuevo la chance y “poder demostrarle al técnico y a mis compañeros de que estoy a la altura de las circunstancias. Gracias a Dios se dio un partido perfecto para mí y para el grupo también porque pudimos mantener el cero ante la arremetida de Atlético, que se vino con todo”.

Entre sus atajadas más importantes recordó que en el primer tiempo le tapo “dos remates a (Diego) Barrado a la salida de un corner que le rebota la pelota en la cabeza a Leonardo Baroni, que se sorprende. Después otra (Guillermo) Acosta y enseguida un remate de afuera que no ví bien al que pateó (Montiglio) pero abrió mucho el pie y por suerte pude sacarla sobre el travesaño”.

“Creo que para mí fue el partido soñado, mantener el cero y a cinco minutos del final del partido atajar dos veces del tiro penal y el rebote. Espero seguir por esta línea, brindándole confianza al técnico y a mis compañeros”, se entusiasmó el jugador proveniente de Nacional Potosí, de Bolivia y con trayectoria en distintas ligas de Chile, Uruguay, Italia y España.

Garavano seguía recibiendo felicitaciones, pero se dio tiempo para agregar “logramos un triunfo muy valioso para seguir en la lucha y seguir escalando posiciones. La verdad, el primer tiempo se hizo muy difícil porque Atlético es un equipo que tiene jugadores de muy bien pie, que manejan la pelota en el mediocampo y la saben usar con pasadas por afuera y nos complicaron”.

Al profundizar el análisis sobre el juego, el nicoleño dijo que en el segundo “nos apretaron un poco más, nosotros teníamos encima el cansancio del viaje y de los dos partidos en cancha barrosa. Nos metimos un poquito atrás y ellos con pelotazos y con varios delanteros que metieron, no les quedaban mucho recursos, pero a pesar de todo pudimos aguantar el resultado muy bueno que nos motiva para seguir creciendo a nivel grupal y también en la tabla”.

Así se cerró un domingo que será inolvidable para Garavano. El técnico Carlos Trullet le dio la confianza y él le devolvió con un desempeño de alto vuelo técnico. Habrá que ver si el domingo, cuando Boca Unidos reciba a Independiente Rivadavia de Mendoza, pueda ratificar lo bueno que hizo acá, en el “Jardín de la República